Presencia Global
3 de Octubre de 2019 | 08:49
Inmobiliarias

Un viaje a la aventura

Normalmente, cuando salimos de vacaciones, se trata de un viaje organizado con anticipación, compramos los vuelos o los billetes de autobús o tren, contratamos el alquiler de un alojamiento, apartamento, hotel, casa rural. Y cuando llega el día, vamos a tiro hecho. Todo organizado y bien planificado, excursiones, actividades de ocio y tiempo libre, prácticas deportivas…

En esta ocasión, vamos a contar la experiencia de una pareja que decidió salir a la aventura, desde coger el vuelo directamente en el aeropuerto, con destino al azar, hasta ir buscando alojamiento en las distintas ciudades que decidieran visitar y moviéndose en un coche de alquiler para tener más libertad de movimiento y no estar sujetos a horarios. Cuando llegaban a una ciudad, acudían a los centros de información turística y organizaban las visitas de acuerdo a las citas y excursiones que más les llamara la atención… y a la hora de comer y cenar, elegían aquellos restaurantes y tascas donde comían los residentes del lugar.

Se trató de una experiencia nueva para ellos y sumamente satisfactoria, tanto que decidieron volver a viajar de esta manera en lo sucesivo. Pero ¿se imaginan como decidieron finalizar sus días de vacaciones? Bueno, después de tanto movimiento aquí y allá, idas y venidas, comer aquí, cenar allá, caminar en tal lugar, alojarse en un hostal, en una habitación de hotel rural… quisieron reservar el alquiler de una casa en Menorca para descansar. 

Encontraron una web para reservar el alquiler de villas en Menorca y no se lo pensaron ni un segundo. Un alquiler en Menorca frente al mar, en un entorno privilegiado, una casa en Menorca con todas las comodidades y equipamiento para sentirse como en casa. Una casa en Menorca con una terraza con vistas al mar ¿puede haber algo más relajante y placentero que desayunar viendo el amanecer? o ¿más romántico y espectacular que observar una puesta de sol con el sonido de las olas?

Simple y llánamente, unas vacaciones de escándalo, unos días para recordar, aventura, movimiento, actividad y para finalizar un lugar para descansar, para encontrar la paz y recargar pilas para volver a lo cotidiano del día a día. 

Un alquiler en Menorca que nos trasporta a la calma y al gusto de admirar paisajes, tumbarse en la arena suave y cálida de sus playas, sorprendernos con la naturaleza salvaje de sus calas, andar sus calles, conocer sus gentes, sin mirar el reloj, sin nada programado, solo dejando pasar el tiempo, y respirando hondo cada instante en esta bella y espectacular isla del Mediterráneo.