Presencia Global
31 de Agosto de 2020 | 07:31
Formación

La dirección de equipos y su aprendizaje

Tener un puesto de responsabilidad en una empresa no se consigue simplemente haciendo acopio de experiencia laboral y conocimientos técnicos y teóricos. Obviamente todo eso es importante, sobre todo de cara a gestionar con suficiente visión de conjunto y de futuro un proyecto específico. Sin embargo, un puesto de responsabilidad, es decir, jefe de departamento, jefa de equipo, etc., implica también algo más: dirigir y controlar el trabajo de un grupo humano de trabajadores y trabajadoras. Y para poder hacer eso se necesita algo más: capacidad de liderazgo, de dirección y de motivación siempre que sea necesario animar para que el ambiente sea más agradable.

Puede que muchas personas piensen que, debido a ello, no serían realmente capaces de asumir uno de esos trabajos especialmente nucleares en una empresa. Sin embargo, las habilidades de dirección y de mando también se pueden aprender y pulir, como todas las demás, y hasta las personas más tímidas o menos extrovertidas pueden aprender una serie de técnicas que les permitan idear estrategias de dirección. Para ello, por suerte, hoy en día existe la posibilidad de acceder a un curso de habilidades directivas en internet.

En general, el universo virtual ha sido testigo de una creciente y exponencial aparición de cursos online accesibles tanto desde el punto de vista de los precios, pues muchos ofrecen becas y descuentos, como desde la perspectiva de la flexibilidad horaria, ya que no están sujetos a la rigidez de los cursos presenciales. Por esa razón, acudir a un curso de gestión de equipos y completarlo con la velocidad que necesitamos puede ser justo lo que las personas más inseguras necesitan para creer no solo que pueden asimilar conceptos de dirección, sino también ponerlos en práctica.

Los cursos de motivación y liderazgo, de hecho, tienen un poco de psicología social, pues se puede aprender más sobre los hábitos de interacción y los estados de ánimo más comunes en ambientes de trabajo bajo presión. La cuestión es que aprender a dirigir no es un don, es una habilidad que se aprende, y accediendo a un curso todo el mundo puede aprender.