Presencia Global
6 de Abril de 2018 | 13:23
Economía

Ideas creativas a partir de palets

 

El medioambiente, un término tan usado y, no siempre, tenido en cuenta como se merece. En general, tendemos a pensar que es un asunto a gran escala, pero, aportando cada uno de nosotros la pequeña parte que nos toca, contribuimos, mucho más de lo que pensamos, a mantener y mejorar, en beneficio propio, de todos y de las generaciones venideras.

 

Vamos a centrarnos, por ejemplo, en los palets. Es increíble la variedad de ideas creativas que pueden surgir de un palet que, aparentemente, ha dejado de ser útil. Una cosa es que ya no sirva para la finalidad para la que fue fabricado en un primer momento, pero, otra bien distinta, es la cantidad de soluciones decorativas para las que podemos reutilizarlo. Los palets de madera podemos reconvertirlos en muebles y auxiliares para la decoración de nuestro hogar. Maceteros, bancos, mesas, estanterías, escritorios, sofás, portarretratos, lámparas… En fin, tantas posibilidades como lo que podamos imaginar. Y, lo mejor, es que no es nada complicado y los resultados son espectaculares. Realmente espectaculares.

 

Además, convirtiendo los palets en muebles reciclados, no solo añadiremos personalidad a nuestra casa y nos ahorraremos dinero sino que y, mucho más importante, estamos reciclando madera, un bien muy preciado, estamos colaborando en la conservación y mejora del medioambiente. Con este pequeño gesto, evitamos la tala indiscriminada de árboles.

 

De la concienciación sobre el reciclaje, han nacido empresas dedicadas a vender y comprar palets. De esta manera, habrá un momento en el que dejaremos de ver vertederos llenos de palets y demás objetos de madera o, de cualquier otro material digno de ser aprovechado.

 

La compra de palets nos beneficia a todos. Estas empresas los almacenan, los revisan y los seleccionan para buscarles una utilidad, según el estado que presenten. Los que estén en muy mal estado, no se desechan, los trituran y convierten en serrín. A otros, arreglan los desperfectos que presenten y los vuelven a utilizar como palets. Otros, los desvían a fábricas que los convierten en muebles de tipo rústico, tan de moda en la actualidad.

 

En fin, como ya hemos mencionado, el margen de posibilidades es casi infinito. Comprar palets para evitar su acumulación en zonas de residuos, es una aportación más que interesante. Un beneficio para las empresas y para TODOS los que tenemos el gusto de habitar este bello planeta. Un planeta que pide a gritos que lo cuidemos. Y que, una parte de la sociedad, todavía sigue sin escuchar.