Presencia Global
19 de Febrero de 2020 | 11:53
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¿Es mejor una FinTech que un banco para solicitar préstamos?

Los emprendedores tienen básicamente dos opciones para obtener el financiamiento que están buscando. La primera es la más obvia: ir a un banco. La banca tradicional es en la mente de las personas la alternativa más fiable y segura, aunque esto no es necesariamente así. Mientras, las empresas FinTech abre otro camino que pueden seguir.

El solicitante promedio suele acudir a un banco para pedir un crédito, y generalmente es el mismo en el que posee una cuenta. En este punto, todavía no está seguro de si va obtener lo que necesita porque es probable que el banco tarde demasiado tiempo en aprobarlo, o directamente le dan una respuesta negativa.

Como consecuencia, el solicitante recurre normalmente a las financieras, pero tampoco son la respuesta apropiada para estos casos porque trabajan bajo más o menos los mismo parámetros que un banco. En este punto, lo que le queda a esta persona es buscar créditos online, lo que quiere decir que son la última opción.

Este comportamiento es bastante común porque pasa de una forma natural por las opciones que creen más convenientes hasta la que parece ser la menos obvia. Sin embargo, la situación es exactamente la contraria. El solicitante debería estudiar con cuidado las opciones que ofrecen las FinTech antes de ir a su banco.

Estudiar con cuidado los caminos posibles, ya sea que los marquen empresas online u offline permite tener un panorama más amplio de las opciones que hay. Si se hace esto con un poco de tiempo y dedicación, es factible ahorrar dinero en los intereses e incluso desaparecerlos.

La mayoría de las empresas que operan en internet para dar créditos prestan montos bastante bajos con tasas de devolución muy altas, pero esto no tiene que ser la norma. De hecho, estas empresas compiten tanto que ahora hay varias opciones diferentes para que cada usuario obtenga exactamente el crédito que está buscando.

Entre estas alternativas las más famosas son los préstamos sin preguntas porque solventan directamente el problema de espera que tienen los bancos y otras entidades financieras tradicionales. Son perfectos para actuar en situaciones de emergencias como la necesidad de ir al médico de inmediato.

Esto no significa que siempre sean la mejor decisión, sino más bien que es beneficioso ampliar el punto de vista para escoger entre una gama más grande de posibilidades. La idea es ubicar el tipo de financiamiento que beneficie más en ese momento en lugar de tener que conformarse.